Valentino Danchev sobre cómo la tecnología ha cambiado la forma en que viajamos - TG Daily
Valentino
Danchev sobre cómo la tecnología ha cambiado la forma en que viajamos
Cuando Thomas Cook (1808-1892) fundó la agencia de
viajes Thomas Cook & Son, se estableció como uno de los primeros agentes de
viajes del mundo. Inicialmente un espectáculo de un solo hombre (el
"Hijo" llegó más tarde), Cook organizó a 150,000 turistas para
asistir a la Gran Exposición del Príncipe Alberto en Londres en 1851. Esta
primera feria mundial fue tan notable por su colección de figuras literarias
como por sus otras exhibiciones. Entre
los primeros estaban Alfred Tennyson, Charles Dickens, Charlotte Brontë ,
George Eliot, Lewis Carroll y William Makepeace Thackeray. Cook usó sus habilidades como impresor capacitado para comercializar sus
paquetes turísticos con atractivos folletos de viaje que ofrecían a los
trabajadores de la fábrica de la era industrial un medio de escape.
Unos 170 años después,
los tiempos han cambiado. Los viajes internacionales y el turismo son una
industria en auge que cosechó la friolera de $7.6 billones de Estados Unidos en
2016. El impacto directo y combinado de alojamiento, transporte, atracciones y
entretenimiento en la economía ascendió a $2.3 billones en Estados Unidos el mismo año. Este crecimiento anual constante ha
comenzado a extenderse a países menos reconocidos como Namibia en África y el
estado balcánico de Montenegro en el sureste de Europa. El crecimiento
monumental de la industria de viajes ha sido impulsado por dos factores
principales: perspectiva y tecnología.
Perspectivas modernas sobre el propósito del viaje
Los viajeros modernos
(léase "Millennial") ven los viajes de manera diferente a los
turistas del siglo XIX que asistieron a la Gran Exposición de Inglaterra. Si
bien la Exposición puede verse como una exhibición elaborada de imperialismo,
su motivo declarado fue "con el propósito de exhibición y estimulo”. ”Sin
embargo, el arte y las materias primas coloniales ocuparon un lugar destacado
en el Palacio Chrystal especialmente construido, mientras que la tecnología, la
maquinaria y los instrumentos científicos, como bombas de aire, barómetros,
telégrafos eléctricos y microscopios, tuvieron un papel algo servil. Aun así,
la revolución industrial que comenzó en Gran Bretaña a mediados de 1700 fue el
precursor de la idea de progreso a través de la tecnología.
Hoy, los Millennials
son la mayor generación de viajeros, así
como los mayores contribuyentes financieros a la industria del turismo. La
razón de su entusiasmo es casi lo opuesto a la de sus contrapartes del siglo
XIX o incluso de las generaciones más antiguas que ahora viven. En lugar de
tratar de imponer los "triunfos" del capitalismo y otras mentalidades
consumistas en otras culturas, buscan conformarse a la cultura local de la
manera más orgánica posible. La idea es abrazar el mundo tal como es y superar
los obstáculos culturales enfocándose en las similitudes que unen a los seres
humanos, una idea que es ayudada y obstaculizada por el papel de la tecnología.
La tecnología como medio para conectarse y desconectarse
Atrás quedaron los
días de panfletos pintorescos, impresos a mano o incluso de anuncios ultra
schmoozy que prometen lo imposible. Los millennials no caen en la trampa.
Pueden detectar una trampa de ventas de "oro sólido" sin mirar el
precio de $ 1, muchas gracias, y se resienten profundamente de cualquier
intento de estafarlos (¿quién no?) Como un insulto a su inteligencia.
A diferencia de la
maquinaria de la Revolución Industrial, la tecnología actual se basa tanto en
la interconectividad como en la productividad. Los consumidores estadounidenses
desean un servicio rápido y fácil, así como la capacidad de compartir
información y conectarse con las personas que les importan. Cuando se trata de
viajar, reservas digitales; check-in en línea y herramientas bancarias;
confirmaciones automatizadas; transmisión en línea y fuera de línea para
películas y música, etc .; una conexión a internet confiable; y un número
creciente de aplicaciones móviles hacen que sea casi imposible ignorar a su
familia, amigos y compañeros de trabajo, incluso si así lo quisiera. El
"ruido blanco" de la vida moderna puede llevarnos a una falsa
sensación de satisfacción, una trampa que los Millennials amantes de la
autenticidad literalmente están haciendo un esfuerzo adicional para evitar.
Viajar como un formulario Descubrimiento y recuperación
Al igual que los
trabajadores de las fábricas del siglo XIX de Cook, los Millennials ven los
viajes como un medio de escape, así como de descubrimiento. Buscan perderse en
una aventura para ganar algo de valor duradero que enriquezca sus vidas. Al
igual que las personas de la era industrial, los Millennials ven la tecnología
como un vehículo de progreso, una forma de hacer del mundo un lugar mejor, o al
menos uno más eficiente. Les encanta la forma en que la tecnología puede
acercar a las personas, pero al final del día, comprenden la importancia de
desconectarse del "ruido blanco" de la tecnología para abrazar la
inmediatez de su entorno.
Esto es especialmente
cierto si su entorno es un destino de viaje lejano, "exótico" y / o
desaparecido (como Venecia o Tombuctú). A los millennials les gusta la novedad
de la aventura sin los peligros que amenazan la vida (piense en un Titanic pre-glaciar
, no en la Reina Africana ). También esperan alojamientos limpios; un
personal amable, servicial y conocedor; y una cantidad razonable de comodidades
modernas, incluso si eligen tirar su iPhone en el inodoro en lugar de usar el
Wi-Fi gratuito para devolver los mensajes de texto de sus ex. Esto es
particularmente cierto en "Bleisure" (Es decir, escapadas de negocios
+ ocio) y el creciente número de Millennials ricos que pueden permitirse unas
vacaciones de lujo. El buen dinero exige un buen servicio.
La importancia continua de los agentes de viajes y grupos de
comercialización
Para un número cada
vez mayor de Millennials , esto significa invertir en un agente de viajes o
alguien que trabaje estrechamente con ellos para anticipar sus necesidades de
viaje durante todo el proceso. Estas son personas que han viajado extensamente
en sus áreas de especialización y se han hecho amigos de los anfitriones
locales, hoteleros, gerentes e incluso chefs. A menudo, la tecnología les ha
permitido trabajar desde cualquier parte del mundo. Esto también incluye
empresas de viajes, como Fidelis Marketing Group, que proporcionan los
elementos contextuales y visuales que dan vida a su próxima aventura de viaje:
una versión elegante de los folletos de viaje de Cook.
Fundada en 2013,
Fidelis está dirigida por Valentino Danchev. Nacido en Sofía, Bulgaria, Danchev
se convirtió en ciudadano mexicano naturalizado y ahora vive cerca de su lugar
de trabajo en Cancún, Quintana Roo, un estado mexicano en la península de
Yucatán. Como inmigrante, Danchev está equipado de manera única para abordar
las preocupaciones que enfrentan los turistas y otros viajeros mientras visitan
un país extranjero y se adaptan a una cultura diferente. Los cinco valores
centrales de la compañía de fidelidad, respeto, perseverancia, fuerza y
trabajo en equipo tienen como objetivo garantizar que la compañía supere las
expectativas de sus clientes al valorar sus necesidades y deseos. Con esos
objetivos en mente, Fidelis supervisa la promoción de membresías privadas de
clubes vacacionales y recorridos en seis resorts de lujo en América Latina,
donde se alienta a los viajeros a enterrar los dedos de los pies en la arena
suave e intercambiar el "ruido blanco" de la tecnología por
brillantes mares azules y cielos soleados.
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